Protección facial
Los protectores faciales son más cómodos que las máscaras o las gafas protectoras.
Pueden formar una segunda barrera sobre las máscaras y en lugar de las gafas para el personal muy expuesto, pero no las reemplazan de manera efectiva.
Son reutilizables y se desinfectan fácilmente con soluciones hospitalarias o con agua y jabón en entornos no médicos. Un beneficio adicional de los protectores faciales es que evitan tocarse la cara, un vector potencial de contaminación de manos y ojos.
